Dliyáyet kun´d´aliniin suk'smám´múládháranivásiniim´

Támís´tá devatá rupam sárdhatri balayánvitam;

Koti saodáminiibhásam Svayambhúliungavesthitám.

`[Se debería meditar en la kun'd´alinii -,que reside en el múládhára cakra en una forma sutil y divina- enroscada tres veces y media -con el resplandor de un millón de lunas- enroscada alrededor del Svayambhúliunga].

        Hay varias glándulas de varios tipos en la estructura humana. Todas y.cada una de las glándulas pueden tratarse como la estación controladora de una [propensidad] mental determinada, y la intensidad de la expresión de las [propensidades] mentales depende de la adecuada secreción de hormonas de estas Glándulas. Como regla general, las hormonas segregadas por las glándulas inferiores no pueden influenciar a las glándulas superiores, pero pueden, directa o indirectamente, influenciar a las glándulas situados en los puntos inferiores. Ya que el sahasrára cakra [correspondiente a la glándula pineal} es el cakra  o plexo más alto, las hormonas segregadas por este plexo pueden controlar a todas las otras glándulas del cuerpo humano. Hace un momento  he dicho que la kulakun'd´alinii, se despierta por la fuerza de las ondas espirituales o del mantra, y estas glándulas ayudan al aspirante espiritual creando dicha fuerza. El sahasrára cakra, siendo el controlador de todas las glándulas, es la estación central de todas las ondas y mantras.

        En todas y cada una de las glándulas o subglándulas importantes reside la semilla de su expresión es decir una mátrka varn´a. De igual modo en el sahasrára cakra [yace la semilla] de todas las expresiones.--es decir, todas las mátrká varn'as están presentes-. La forma sintética de todas las mátrká varn'as es el onm´ kára (sonido onm). Así pues, es tan claro como el cristal que la potencialidad de expresión de todos los instintos de la mente humana yace en el sahasrára cakra.

        La [estaticidad] humana se puede convertir en espiritualidad o divinidad, sólo después de llegar el sahasrára cakra. El plexo más inferior, el múládhára , es el asiento de la crudeza, y el plexo mas elevado, el sahasrára, es justo lo opuesto, es el asiento de la conciencia. Así que la gente de instinto animal no tiene otro camino, si quieren liberarse de las ilusiones mundanas tendrán que llevar a la kulaku'nd´alinii desde el múládhára hasta el sahasrara. El espíritu interno de elevar la kulakun'da'¡linii es para controlar las [propensidades} y sonidos semilla de las distintas glándulas y suspenderse uno mismo en Paramashiva [el Núcleo Conciencia], cuyo rango está más allá del alcance de los instintos y so- nidos semilla. Es un proceso de quebrantar las páshas [ataduras] de toda debilidad mental; y después de conquistar todas estas debilidades y otros ripus [enemigos] mentales, transformar la animalidad en divinidad. Este sádhaná de la kula'kun´dálinii es una gran lucha. Después de establecerse por encima del alcance de todos y cada uno de los instintos, ideas y sonidos semilla, el sádhaka debe continuar su lucha con la intención de fundirse a si mismo en la Entidad Suprema, que está más allá de la esfera del mundo de la ideación. Así que la sádhaná del Tantra es una gran batalla, una sádhanásamara.